viernes, 5 de septiembre de 2025

Batalla financiera a medio gas, el BBVA planea dominar Sabadell con solo el 30%

Hoy tenía pensado descansar, poner los pies en alto y olvidarme por unas horas de trincheras bursátiles, mientras miraba un Anime o un K-Drama. Pero no, los conflictos económicos no entienden de fines de semana ni de siesta española, siempre encuentran la forma de sacudir la artillería. Y en el campo de batalla de la OPA del BBVA sobre el Sabadell, las bombas siguen cayendo.

Así que los partes de guerra llegan con noticias frescas, el BBVA, cansado de asaltar trincheras sin fin y sin tregua, parece estar dispuesto a conquistar el Sabadell con solo el 30% del territorio. Nada de banderas en todas las torres del castillo, basta con una bandera en el baluarte principal para controlar el resto. En términos sencillos para que me entendáis, aunque no tenga la mayoría absoluta de las acciones, con un tercio en el bolsillo ya podría mandar las tropa y decidir la estrategia.

Pero la batalla no se libra solo en suelo ibérico. A la fiesta se han unido también los aliados de ultramar. Resulta que la SEC (el regulador de Estados Unidos), ese general lejano que siempre quiere opinar aunque no esté en el campo de batalla, ha concedido tres dispensas especiales al BBVA. En castellano plano y entendible, le ha dado permiso para sincronizar el calendario de la OPA en EEUU con el de España, evitando el caos de tener dos relojes distintos marcando la hora del asalto.

La CNMV, por su parte, ya había metido la patita en la trinchera para vigilar cada movimiento, como ese soldado que apunta en su libreta cada disparo para ver si falta munición. Ahora, con la bendición de la SEC, el BBVA tiene más margen para ordenar sus tropas y no morir en la burocracia de plazos descoordinados.

¿Qué significa esto para los accionistas del Sabadell?

  • A favor: Si el BBVA controla el 30%, podría dar estabilidad y respaldo financiero. Eso haría que las acciones del Sabadell siguieran siendo atractivas en el corto plazo, porque se percibe en las sombras una “protección” de un gigante.

  • En contra: También significa que los accionistas minoritarios podrían perder voz en la gestión. En vez de decidir el destino del banco, acabarían obedeciendo las órdenes del nuevo general  del BBVA.

¿Y para los accionistas del BBVA?

  • A favor: Tener el 30% sin necesidad de gastar en una conquista total puede ser visto como un golpe maestro, ya que menos inversión, más control. Eso podría gustar a algunos inversores que no quieren que el banco se endeude en exceso.

  • En contra: Pero claro, controlar un ejército con solo un tercio de las tropas puede ser inestables y podría haber revueltas e insurgencias. Si la integración no va bien o los accionistas del Sabadell se rebelan, puede convertirse en una guerra civil bancaria más cara que una invasión completa.


“El BBVA logra el beneplácito del regulador yanqui, que le concede tres dispensas para cuadrar sus relojes de campaña. Mientras tanto, en la península, los inversores del Sabadell se preguntan si ceder un 30% de su fortaleza es suficiente para entregar el mando y los del BBVA dudan si esta jugada es una conquista brillante o una emboscada disfrazada. Se recomienda a las tropas de accionistas mantenerse atentos, los tambores de guerra no cesan y septiembre promete pólvora fresca.