Hoy nos llega una historia tan tierna que podría competir con cualquier anuncio de Navidad de turrones, el presidente del Banco Sabadell, cual rey magnánimo en su trono financiero, ha decidido celebrar la gran victoria corporativa organizando la fiesta definitiva para sus trabajadores. 🎉
Pero ojo, no para todos. No vaya a ser que la generosidad se extienda demasiado y peligre el presupuesto para los canapés de salmón.
Resulta que ha anunciado que regalará 300 acciones del banco a los empleados… pero sólo a los que trabajan directamente en el banco. Sí, esos que están en oficinas, que te llaman por tu nombre aunque no sepan quién eres y que, cuando vas a preguntar cualquier cosa, te ofrecen un seguro, una alarma para tu casa, un préstamo para la comunión de tu primo y, si dices que no, te miran como si hubieras pateado un gatito.
Mientras tanto, ¿qué pasa con los héroes invisibles del sistema financiero?
Esos trabajadores subcontratados, que atienden llamadas a las 3 de la mañana cuando te bloquean la tarjeta porque intentaste comprar kebab y cripto en la misma noche, los que están en chat o al otro lado del teléfono resolviendo dudas cuando el día festivo ni ha empezado y ya están con el café intravenoso, los que escuchan más “no me funciona la app” que tu cuñado en Navidad diciendo “yo invertí en Bitcoin en 2011”.
Esos que están 24/7 como si fueran vigilantes galácticos, pero sin sable láser, sin capa… y aparentemente, sin acciones. Puede que existan accionistas minoritarios y que tomen nota para cuando llegue la siguiente OPA 2.0.
Porque, claro, ellos solo dan soporte, paciencia, soluciones, contención emocional y sobre todo… resultados reales.
Pero ¿quién necesita todo eso cuando en la oficina te pueden ofrecer otro plan de pensiones para tu perrito y que no pediste?
Así que mientras los empleados de sucursal brindarán con cava y contarán acciones como quien colecciona cromos, los subcontratados podrán celebrar… bueno, su turno de madrugada. Con suerte les tocará un “gracias por contactar con nosotros, su llamada es importante” en versión Navidad.
Eso sí, el banco seguro que enviará un comunicado lleno de gratitud diciendo algo como, bueno si es que llegará ya que lo más seguro que se quedará en el olvido:
> “Valoramos profundamente el esfuerzo de todos los profesionales que forman parte del ecosistema Sabadell.”
Traducción de este mensaje:
Valoramos que trabajes muchísimo, pero las acciones se las damos a los oficiales del castillo. Los sirvientes pueden seguir con sus quehaceres, gracias.
Moraleja, porque si que la tiene:
En el maravilloso reino bancario, hay nobles que reciben acciones…y hay soldados que salvan el castillo, pero como mucho reciben un correo motivacional y un turno extra el 1 de enero.
Pero tranquilos, que la economía va genial, y seguro que el año que viene os regalan algo… como un llavero corporativo o si hay presupuesto, una taza motivacional: